Este hotel se centra en la creación de un espacio que combina naturales y arquitectura, donde los espacios verdes son fundamentales para refrescar y enriquecer la edificación. 

La fachada escalonada permite que cada bloque funcione como un micro ecosistema, en el que los arboles y plantas son parte integral del edificio. 

Estos espacios no solo aportan a la estética, sino que también regulan la temperatura, mejorando el confort interno de forma natural. 

Los interiores se diseñan pensando en el usuario final aquel que va a disfrutar de los ambientes se trabaja con materiales de la zona creando lugares únicos y memorables que quedarán en la memoria de quienes visitan el lugar, de esta manera el hotel se ve beneficiado al ganar clientes que con